El restaura mi alma; me guía por senderos de justicia por amor de su nombre. Aunque pase por el valle de sombra de muerte, no temeré mal alguno, porque tú estás conmigo; tu vara y tu cayado me infunden aliento". Salmos 23:1-4 (LBLA)
La palabra "valle" en la Biblia generalmente se la asocia con tiempos de tristeza y angustia. A esta altura, todos sabemos que nuestra vida no es precisamente un "lecho de rosas". Jesús mismo lo dijo: "En el mundo tendréis aflicción; pero confiad, yo he vencido al mundo". Juan 16.33
Recientemente me ha tocado transitar por este valle oscuro, dominado por la muerte, donde las palabras escasean y abundan las preguntas.
Es muy importante creer que Dios sigue estando con nosotros y que Él nunca nos ha abandonado ni tampoco piensa hacerlo en el futuro. Experimentar la presencia sanadora de Dios es indispensable para fortalecerse con el fin de seguir caminando lo que nos resta de vida.
Seguramente no podremos evitar atravesar por estos valles de sombra de muerte a lo largo de nuestra vida, pero lo que sí debemos evitar es desviar nuestra mirada de las cosas de Dios. Tenemos dos opciones: o soltarnos de su mano y enfrentar nuestro sufrimiento en soledad, o aferrarnos aun más fuerte de la mano del Señor, quien nunca nos abandona.
Simplemente quisiera compartir aquellos versículos que me han ayudado a atravesar confiado este valle de sombra de muerte. Sé que la Palabra de Dios te fortalecerá, cualquiera sea la situación que estés viviendo en este momento.
"Hermanos míos, queremos que sepan lo que en verdad pasa con los que mueren, para que no se pongan tristes, como los que no tienen esperanza. Nosotros creemos que Jesucristo murió y resucitó, y que del mismo modo Dios resucitará a los que vivieron y murieron confiando en él." 1 Tesalonicenses 4:13-14 (Biblia Traducción Actual)
"Ustedes los cielos, ¡griten de alegría! Tierra, ¡regocíjate! Montañas, ¡prorrumpan en canciones!
Porque el Señor consuela a su pueblo y tiene compasión de sus pobres." Isaías 49:13 (NVI)
Dios bendice a los que sufren, pues él los consolará. Mateo 5:4 (TLA)
"Dios nos ayuda en las dificultades y sufrimientos. ¡Demos gracias a Dios, Padre de nuestro Señor Jesucristo! Él es un Padre bueno y amoroso, y siempre nos ayuda. Cuando tenemos dificultades, o cuando sufrimos, Dios nos ayuda para que podamos ayudar a los que sufren o tienen problemas". 2 Corintios 1:3-4 (TLA)
Hoy Dios te dice lo siguiente: "Así que no temas, porque yo estoy contigo; no te angusties, porque yo soy tu Dios. Te fortaleceré y te ayudaré; te sostendré con mi diestra victoriosa". Isaías 41:10 (NVI)
Con esa promesa, repito como el salmista: "¡Pero yo sé que viviré para disfrutar de tu bondad junto con todo tu pueblo! Por eso me armo de valor, y me digo a mí mismo: «Pon tu confianza en Dios. ¡Sí, pon tu confianza en él!» Salmos 27:13-14 (TLA)
Otra versión dice: "Hubiera yo desmayado, si no creyese que veré la bondad de Jehová en la tierra de los vivientes.
Aguarda a Jehová; Esfuérzate, y aliéntese tu corazón; Sí, espera a Jehová".
"Tú guardarás en completa paz a aquel cuyo pensamiento en ti persevera; porque en ti ha confiado". Isaías 26.3
Tus promesas me dan vida; me consuelan en mi dolor. Salmos 119:50 (TLA)